Las observaciones se hacen de noche: oscuridad

La mayoría de las observaciones astronómicas se realizan de noche. Y de noche todo está oscuro. Es por tanto necesario llevar alguna luz que nos facilite movernos en el lugar de la observación y que nos permita controlar con comodidad los equipos que vayamos a operar (cámaras, ordenadores, telescopios...).

Sin embargo, si queremos disfrutar el cielo nocturno debemos usar luces tenues o, mejor aún, de color rojo, ya que este tipo de luces evitará que nuestras pupilas se contraigan y nos permitiran disfrutar del cielo nocturno sin estar deslumbrados.

Nosotros recomendamos usar linternas frontales (las que podemos ponernos en la cabeza con una banda elástica) que tengan modo de iluminación con luz blanca o luz roja. La luz blanca es mucho más útil cuando estamos recogiendo y a punto de irnos del lugar de observación y la luz roja la usaremos mientras hacemos la observación. Por supuesto, mientras estamos observando, si tenemos que encender alguna luz, procuraremos molestar lo mínimo posible al resto de los observadores y nunca apuntar las luces a los equipos que puedan estar haciendo mediciones. Si quieres saber un poco más sobre este tema puedes leer este artículo (en inglés).

 

Climatología: frío

Sea verano o sea invierno, de noche hace frío. Probablemente mucho frío. Además normalmente durante las observaciones nos moveremos poco, con lo que nuestro cuerpo no generará mucho calor. Es imprescindible si no queremos pasar un rato incómodo vayamos bien preparados para cualquier temperatura que encontremos. El viento y/o la niebla pueden además acrecentar la sensación de frío.

Para las observaciones astronómicas recomendamos llevar muchas capas de ropa que podamos ponernos o quitarnos según vayamos necesitando. Es mucho mejor que nos sobre ropa (y que la dejemos en el coche sin utilizarla) a que nos falte y pasemos frío. Si tienes ropa de montaña, abrigos gordos, ropa interior térmica... échala toda. Es muy importante no enfriarte, puesto que una vez con frío, recuperar la temperatura es muy difícil.

Recuerda echar gorro, braga para el cuello, incluso pasamontañas para la cara. La cabeza pierde mucha temperatura si está expuesta al aire frío nocturno. Los guantes son tambien elementos imprescindibles. En ocasiones llevamos guantes dobles. Uno fino debajo que nos permite manejar con cierta soltura nuestros aparatos y encima unos buenos guantes invernales para protegernos mientras no estamos operando elementos. Los pies también hay que protegerlos bien, ya que son los que están más cerca del suelo y casi en contacto directo con él. Calcetines gruesos y unas buenas botas son muy aconsejables.

Bolsa de agua caliente

Clásica bolsa de agua "de la abuela". Un clásico para calentarse en las observaciones.

Aparte de todos los elementos pasivos que hemos comentado (que evitan que perdamos temperatura corporal), también podemos utilizar elementos activos, que nos calienten durante un periodo de tiempo. Existen auténticas sofisticaciones como prendas calefactadas alimentadas por baterías o calentadores de gel en las que una reacción química calienta una bolsa durante un rato. Sin embargo, algunas soluciones "primitivas", como la clásica bolsa de agua caliente que se usan para calentar las camas cuando no hay calefacción pueden darte un aporte de calor que se agradece mucho.

Recuerda: incluso si durante el día ha hecho calor (como pasa en verano), unas cuantas horas de noche al aire libre pueden hacer que el más caluroso pase un mal momento.

 

Alimento y bebida

Aunque no planeemos estar mucho tiempo de observación, llevar algo de comida puede ayudarnos a pasar mejor el rato de observación. Comidas calientes (como una sopa, café o té) pueden sentar de maravilla ante el frío que nos podemos encontrar. Algún tipo de aperitivo también suele ser agradecido tras unas horas de observación.

No olvides llevar también suficiente agua o bebidas. Y piensa que siempre habrá compañeros que se olviden llevar sus propios alimentos, así que si echamos algo extra para esos casos, nos estarán muy agradecidos.

 

Elementos de comunicación

En muchas ocasiones las observaciones se hacen en sitios poco poblados para evitar la contaminación lumínica. Siempre es bueno llevar los móviles cargados a tope por si hace falta comunicarse con otras personas (que vayan a llegar más tarde o por si surge alguna emergencia). Recuerda que el móvil no solo sirve para hacer llamadas. Lo podemos usar de linterna de emergencia, como GPS para orientarnos o para buscar información sobre la observación que vayamos a realizar.

Además es siempre buena idea avisar a nuestros allegados de la zona por la que vamos a estar y la hora prevista de regreso, por si surge algún contratiempo y necesitan localizarnos (no sería la primera vez de un coche que se queda sin batería en mitad del campo).